lunes, julio 21, 2008

Oh! La inercia



El Summercase no tenía este año el cartel más apetecible del mundo, pero está cerca de mi casa. Lo de cerca es en distancia, porque en tiempo y en transporte público está más o menos a lo mismo que Valladolid, pero bueno, que puedo dormir en casa y levantarme a la hora que quiera y comer a gustico sentado en mi mesa viendo la TV. Así que para allá que fuimos. En esta edición no hemos estado muchos, ni del grupo de amigos ni en general. No tengo datos, pero se notaba que había menos público que en otros años.

Como en cualquier festival de organización barcelonesa, la seguridad brillaba por su ausencia. Creo que si un loco llevara una pistola nadie se daría cuenta. Ya sé a que se refiere Carla Bruni cuando dice que no puede hacer gira con su disco nuevo por motivos de seguridad. El primer año cacheaban y pasaban las entradas por un láser. Ahora colábamos los zeppelines como nos daba la real gana. Me imagino que los organizadores lo sabrán, pero les dará igual porque aunque te vengas preparadísimo de casa te acabas gastando algo.



El viernes llegamos temprano, pero nos quedamos fuera un ratejo y se formó una cola para entrar tremenda, parecía un proceso de regularización del gobierno Zapatero. Cuando conseguimos entrar ya habían terminado Antonia Font y me fui con Maryta e Iban a ver a Dorian, un grupo que ni fú ni fá. No paraban de decir cosas tipo "Vamos, Madrid" a pesar de que estábamos en Boadilla del Monte y que la mitad de la gente no era de Madrid. Bailamos un poco y corrimos al escenario Movistar porque quedaba nada y menos para que empezaran las Breeders, uno de los grupos que más me han marcado en mi vida. El Last Splash me sorprendió tantísimo... De camino a las Breeders escuchamos un poco a The Kooks, un grupo del que paso de cebra. El caso es que no me habían hablado muy bien de los directos de las hermanísimas, pero vi las primeras 7 u 8 canciones y me gustaron mucho. Las gemelas Deal cada vez se parecen más y era difícil diferenciarlas. Me imagino que Kim era la que cantaba más, pero es que hasta la voz la tienen igual. Como empezaron fuertes (Bang on, Cannonball, Divine Hammer, New Year...), me fue suficiente y corrimos a ver el final de Los Campesinos! Tiene cojones que quiera ver a 5 grupos el viernes y 2 coincidan, pero así fue. De todas formas tuve suerte, porque cuadno llegué tocaron los temas que más me gustan. No sonaban demasiado potentes, pero la chica, como cualquier chica de Gales que se precie, canta genial y todavía llevan muy poco tiempo como para haber perdido su furia ruidosa. Alguien que estuvo en las primeras filas me comentó al día siguiente que las voces no se oían bien... todo lo contrario que desde nuestro puesto. Vamos, que un concierto te puede cambiar según dónde te pongas. Yo nunca voy muy cerca porque me agobio, y más si es de día. El calor ha sido bastante insoportable en el festival, por cierto. Tras Los Campesinos! nos tiramos en un césped artificial y nos entró una modorra, una tontería y un hambre-calambre que nos atrapó. Nos perdimos en ese receso a The Stranglers, Kings of Leon y Mogwai, pero mereció la pena porque lo pasamos muy bien. Estábamos tan empanados que teníamos al lado el puesto de Singstar y cuando sonaban canciones de algún grupo que tocaba en el festival creíamos que era el concierto. Cuando despertamos de nuestro oasis raruno nos dirigimos a ver a Facto Delafé y las Flores Azules. Este grupo, para mi gusto y el de algunos más, está siempre en la fina barrera del ridículo. Tiene algunos temazos, pero hay otros que me dan verguenza ajena y que no puedo escuchar. Cuando empezaron se llenó la carpa y el calor humano se condensó y el sudor general hizo del ambiente algo insoportable. A las tres canciones, cuando la gente se estaba pirando para poder seguir viviendo sin lesiones cerebrales por falta de oxígeno, alguien decidió abrir la carpa por los lados y ya todo fue bien. Tengo que decir que el concierto me gustó, pero no reseñaría nada particular. Las que siempre son divertidas y que además han aprendido a tocar mucho desde el FIB del año pasado son las Cansei de Ser Sexy, otro de mis grupos favoritos. Lo siguiente (y lo último) que vi fueron Los Planetas, que se superaron en nivel de aburrimiento y de pasotismo. Menos mal que ya no soy fan, porque si lo hubiera sido les habría lanzado algo lleno de arena para hacer daño. De verdad, si van a hacer esos conciertos que no toquen, o que dejen de contratarles, porque siempre te la estás jugando. El año pasado en el Primavera tocaron el último disco (que a mí me parece UNA BASURA) para luego hacer un greatest hits que nos dejó con buen sabor de boca. El concierto del viernes fue un trámite para que les pagaran y para agrandar su fama de rancios y odiosos. El viernes acabó como tiene que acabar cualquier festival, desbarrando, y buscando cosas gratis. Yo me bebí cien litros de agua del PUNTO DE AGUA que me sentaron fatal. El agua esa no sé si era potable, pero vomitable era un rato.



El sábado me levanté prontísimo (11) y contra todo pronóstico no demasiado mal. Desayuné, me fumé un cigarro, me puse el bañador y salí a la piscina de Miguel. Allí estaban Miguel (obvio), Marina, Sergi y Francis. Nos remojamos, hablamos del día anterior y yo me puse rojo del solazo que hacía. Nos tomamos una caña en La Madrileña, donde ponen las mejores aceitunas de España, aliñadas con muchos vegetales cortados en trozos pequeños y bastante comino. También catamos una caña de la Maloka, el bar nuevo de Majadahonda con tapas finas del que ya he hablado en alguna ocasión. Leímos los mejores momentos de la Cuore y Sergi me habló de una serie de los 90 que tengo que conseguir. Se llama Absolutely Fabulous o algo así. Por la tarde me eché una siesta y por mi culpa Miguel se perdió a Ian Brown... Desde aquí te digo que lo siento. Cuando llegmaos al recinto nos encontramos con Selene, que había entrevistado a los Raveonettes y estaba medio loca con el cantante. La cantante está embarazada y la han sustituido por su hermana durante la gira. Entramos con tiempo para ver a Blondie. Bueno, ¡qué conciertazo! De verdad, Debbie Harry tiene los 63 años mejor llevados del mundo. Salió con unas wayfarer, una camiseta marinera, unas bermudas rojas y una marcha muy superior a la media del público. A pesar de que tocaron Maria, su peor canción, repasaron todos sus hits. Era imposible dejar de bailar escuchando Heart of Glass, One Way or Another, Call Me, Hanging on the Telephone... Como era parte de la gira del aniversario del Parallel Lines la escenografía estaba basada en la portada, con un fondo de líneas blancas y negras y el nombre del grupo en plan OP ART.



Nos tuvimos que ir a pesar del conciertazo porque el final de Blondie coincidía con el principio del grupo que más me apetecía ver: Interpol. La verdad es que no defraudaron, también me parecieron de lo mejor del festival. Tocan muy bien y tienen canciones sólidas. El cantante en las pantallas gigantes se parecía inquietantemente a Kurt Cobain, tenía la misma mirada de loco que el rubio de Seattle en el Unplugged in New York. No se centraron mucho en el último disco y lo agradecimos. Tiraron más del segundo y el primero, que son los que más nos molan al público. A ellos, como a todos los grupos, lo que más les gustaba tocar eran las del último, y a mitad de concierto se marcaron 3 o 4 lentas seguidas cuyo efecto fue el abandono de los no-fans. Como nos habíamos desperdigado, quedamos después de Interpol en un punto de encuentro desde el que vimos algún tema de Juan McLean, un grupo de tecno que ninguno conocíamos y que no sonaban mal. A los que sí conocíamos era a Maximo Park, un grupo que es el perejil de todas las salsas festivaleras españolas. Siempre caen en alguno, tengan disco o no, estén de gira o no. Como siempre, divertidos, aunque tocaron muchas del segundo disco, que es bastante flojo. Es increíble que las canciones de A Certain Trigger sigan siendo tan buenas como antes. Creo que ese es el último concierto que vi, por lo menos no me acuerdo de mucho más. Sé que envenené a Heanr con un croissant de salami y que estuve bailando hasta el amanecer, que quería irme de after pero que al final me venció la responsability (y las pocas ganas de levantarme el domingo hecho un cirio) y me volví en autobús con Alber, Elena, Cheti y Guille. Había alguna fauna festivalera de la que formábamos parte en parte, porque iban mucho peor. Yo me comí una fresquilla que me sentó de maravilla. Al parecer, me perdí un after en el que solo sonó PUBLIC ENEMY.



Para acabar con lo del summer: los escenarios este año estaban mejor colocados, por lo menos ya no había bootlegs. El año pasado, si te ponías entre los dos escenarios principales, podías oir Erase & Rewind de los Cardigans mezclado con el One More Time de los Daft Punk. Este año NO. El recinto de Boadilla sigue siendo una mierda, lleno de arena que se te mete en cualquier sitio (mocardos negros) a pesar de que se había anunciado que lo habían mejorado. Los baños muy cerdos (dark smiley in the poliklin), pero eso es un mal endémico de los festivales de música. Los horarios muy mal hechos, grupos finos tocando muy pronto y coincidiendo unos con otros. Los stands muy extraños: cocacola al lado de la policía de Madrid (que daban cajitas de pastillas de menta con el escudo de la Academia de Policía y que tengo que tunear escribiendo LOCA arriba), el singstar, las máquinas de tabaco sin Lucky, el Telepi un poco desapercibido... Otra cosa: no sé qué interés tienen las promotoras en La Guerra de los Festivales, pero al final salimos perdiendo nosotros, porque la oferta será muy amplia, pero los carteles son un nada que ver. Todavía me acuerdo de esos carteles del FIB en los primeros años de siglo, cuando te gustaban casi la mitad de los grupos que iban. Ahora con que vayan 6 o 7 ya te conformas.

Por último, dar las gracias a todos los que me lo habéis hecho pasar tan bien: Miguel, Marina, Henar, Alber, Sergi, Francis, Guille (¡perdón por olvidarte!), Maryta, Iban, Selene, Guillermo, Elena, Ana, Cheti, Raquel, Eloy, Diego... espero no dejarme a nadie. Los festivales solo son divertidos porque vas con gente chula, no porque toque Nick Cave o El Guincho.

Ala, ya está.

(pincha en el título de la entrada para vernos hacer el canelo)

3 comentarios:

GUATEQUE dijo...

Que si que si, que bien...
Pero yo sigo con eso de lo deee que este año ha sido un FULL!

Leo-te pa!

Gelsomina dijo...

Y a mí no me lo AGRADESSES?? Grosero!

A.L. dijo...

Creo recordar que el año pasado ya nos quejamos bien de lo del polvo y tal en plan NUNCA MÁIS. Y aquí estamos, como viejas peregrinando a Lourdes, un año más.
Ay! que bien me lo he pasao. Pero ese paquete de CAMEL ORIGINAL me supo a cuero viejo y a Túnez. demasiado camel para mí gusto.