MOUSTACHE

Estoy viendo en el programa de Patricia Gaztañaga (me encanta ese apellido GAZ-TA-ÑA-GA) y al parecer van a entrevistar a una familia que vive en una autocaravana. ¿Te imaginas que acabamos como en EEUU, con esos "barrios" de autocaravanas? Siempre que salen en las pelis o en las series me da una pena y una angustia... En fin, espero que no.



El jueves bajamos a Madrid un ratejo a cenar en el Wok de Plaza de España. Estuvimos hablando de entrevistas de trabajo y perspectivas de futuro. Mi situación actual sigue siendo NO FUTURE. Si en tiempos de crisis el ingenio se agudiza, debe ser que no tengo ingenio, porque no se me ha agudizado nada, solo la situación casi crítica de mi cuenta corriente. Cuando salimos del Wok estaba lloviendo, asíq ue nos cogimos el metro hasta Malasaña. Entramos un segundo en Casa Camacho, pero pasamos del agobio y nos piramos al Freeway. Han hecho un concurso de maquetas que tiene un cartel muy chulo en el que pone: I'M FREE WAY. Pusieron unos temazos clásicos (I'm waiting for my man, Even flow...) y nos bajamos al sotano, que suele ser más modernillo. Bailamos Whip it de DEVO y nos volvimos a casa.

El viernes Nabo y yo pinchábamos en el Redrum. La última vez que pinchamos allí creoq ue fue un año y medio antes, y se llamaba Algoennegro. Durante el día estuve escuchando mucha música y grabando algún cd. Quedé con Jaime para bajar a Madrid en bus y fuimos de previo a casa de Adrián. Me cené un sandwich de Roast Beef del VIPS que era más grande que mi cabeza. Vimos, como cada viernes noche que estamos en una casa, un trozo de Callejeros. El tema era la Plaza de Sol, creo, y salía una yonki diciendo: ME CAGO EN MI PUTA VIDA. La pinchada estuvo GENIAL. Me lo pasé muy bien y la gente parece que también, pero eso lo sabrá cada uno. Yo sí. La cabina es muy pequeñica, pero siguen teniendo el luminoso en el que puedes escribir lo que te dé la gana y mola. El caso es que mi hermano vino y me pidió que escribiera mensajes marxistas que creo que nadie (incluido yo) llegó a entender del todo. Más que nada por el sitio. Pero bueno, que muy bien, oye. A ver cuándo repetimos. A la salida buscamos infructuosamente un local que nos medio agradara a todos y que no fuera muy caro. En el Taboo había mucha cola, así que nos hicimos nuestro propio Callejeros con al ienstimable ayuda de los chinos vendedores ambulantes. De vuelta a casa, con Santi, nos pasamos por el 7/24 a picar algo y cuando salimos nos encontramos a Chema y Pat. Santi, como ya conté en otro post, es un imán del pasado. Si vas con él, te vas encontrando con tu pasado el el momento más inesperado. Me marqué un speech sobre los informativos de Telecinco que no sé muy bien a santo de qué, de repente me vi soltando palabras sin poder detenerme. Cuando llegué a casa eran las siete, bajé al perro y me puse Kill Bill 1.



El sábado me desperté pagando el peaje del día anterior y me quedé anclado en el sofá. Solo me levanté para bajar al perro (dios, qué ganas de que vuelva mi madre) y para preparar la comida. Me tragué algunos capítulos de mis series del momento y también Oviedo Express, la última peli de Gonzalo Suárez que pasó sin pena ni gloria. No es ningún peliculón, pero tiene cosas muy locas y el elecno está muy bien. De hecho, algunos actúan fatal, pero todo el rato te das cuenta de que se les ha pedido que actúen así de mal. Mi escena favorita está protagonizada por Aitana Sánchez-Gijón y la frase central es ¡I AM MARIOLA MAYO!, así, en inglés. Estuve riéndome un buen rato en mi sofá. Por la noche quedamos para picar algo en Olavide, el clásico combo tortilla de patatas-ensalada mixta. Yo lo regué con un tinto de verano, que hacía un tiempazo de la leche. Después nos fuimos hasta Viriato, que era el cumple de Bill y lo celebraba en un bar que se llama Anyway. Así en principio no éramos exactamente el público objetivo del bar. Era un rollo escocés con temática fútbol lleno de fotografías de partidos, calendarios de liga y bufandas de equipos. Pero la música estaba bien, era rollo Strokes, Kaiser Chiefs y demás grupos de hace 4 años. Además Bill se lo había montado fenomenal y había chucherías, cortezas y copas a precios MUY populares. Nos tomamos un par de gintonics. Cuando salimos estaba cayendo el diluvio universal y Marta y yo nos dejamos llevar por la lluvia hasta un taxi. El problema es que la lluvia nos arrastró hasta José Abascal y entramos en el taxi calados hasta los huesos. Un taxista bien majo y gallego nos llevó hasta la puerta de nuestra urbanización brutalista de Majadahonda. Nos despedimos prometiéndonos que el domingo iríamos a ver BURN AFTER READING.



Así que el domingo eso hicimos, irnos a ver BURN AFTER READING. Antes nos tomamos un capuccino y un brownie en la Bajocero, esa heladería argentina finísima que hay en la plaza de Quevedo. Bueno, la peli es un puto peliculón. Muchas carcajadas, unos actores en estado de gracia y una historia construida sobre la nada al más puro estilo McGuffin de Hitchcock. Los Coen se las saben todas, y aunque les encargaran rodar Dos tontos muy tontos, ellos harían algo inteligente y casi arte y desmayo. John Malkovich está afectadísimo e histriónico, Tilda Swinton fría y distante, George Clooney contenido, Brad Pitt desatado. Pero lo mejor es Frances McDormand, la detonante de toda la no-trama, que cada vez que sale se te pone una sonrisilla automáticamente. Muy recomendable, creo que una de las pelis del año. La semana que viene toca ver Camino, el primer drama de Fesser y una de las pocas pelis que se han atrevido a meter el dedo en la llaga del OPUS DEI. Marta ya la ha visto y flipó.

Hoy me he despertado y he acabado con el bigote que me he dejado para el fin de semana. Qué rollo es llevar bigote. He limpiado la cocina y el salón, he echado unas ofertas en infojobs para hacerme falsas esperanzas y he perreado el resto del día.

Hurgando por filmaffinity vi que en Canadá han hecho una serie de jPod, el libro de Douglas Coupland. La necesito. La necesito cuanto antes. Ese libro es una locura, con que la serie sea la mitad de desquiciada, me vale. I need it. La he encontrado en hispashare, al parecer la han emitido en España, en el canal Buzz. Bien, otra serie al saco.





Ha muerto Jorg Haider, el adalid del nuevo fascismo, la imagen de la vuelta de la extrema derecha a los parlamentos europeos. Miedo y alivio.

Esta semana tengo que ir a la fuckultad a ver si todavía estoy a tiempo de empezar un doctorado, o algo. El jueves iremos al Nasti a ver a El Guincho. Y el sábado a los Hola a Todo el Mundo. La tarde-noche del sábado va a ser dura: primero vamos a un musical en un colegio católico que hay por el Paseo de Extremadura. El año pasado vimos el montaje que hicieron de Hairspray y flipé, qué producción. Al parecer ya han hecho un montón de musicales de Broadway. El sábado presentarán Seussical, un musical basado en los cuentos de Seuss, que yo no sé quién es, pero bueno. Después, a las 9, iremos a la Casa Encendida al concierto de Hola a Todo el Mundo, el grupo por el que varias discográficas (incluidas algunas gordas) y que al final han optado por la independencia absoluta. Bravo por ellos. Y a última hora me encantaría ir al aniversario del Elástico, que pinchan los Horrors y son bien divertidos en la cabina. Vamos, que necesitaremos vitaminas, yo sobretodo teniendo en cuenta mi perrería habitual.



El otoño es una época en la que se caen las hojas y surgen los planes. No sé por qué, será por la vuelta al cole, pero estrenan mil pelis chulas y vienen todos los grupos a tocar. Quiero ver a: The Streets, Los Campesinos!, Mercury Rev. A Sigur Ros no que ya no hay entradas. Y lo que vaya surgiendo en plan más pequeño, como los dos conciertos de esta semana o el de la Habitación Roja. Qué bien, no tener futuro pero tener planes de ocio.