Pues sigo:
El viernes, como me había vuelto pronto, me levanté fresco como una lechuga tras 8 largas horas de sueño. La verdad es que me vinieron bien. Estuvimos echando unas playstation 2, concretamente unos Katamari Damacy y unos Dragon Ball. El de Katamari es un jaleo. Los dibujillos molan, pero Guille y yo fuimos incapaces de superar la primera pantalla. Se trata, cual escarabajo pelotero, de ir cogiendo tratos del suelo y amontonarlos en una bola que se va haciendo grande y más grande. Lo que más nos gustó, sin duda, fueron las instrucciones que daba un rey de baraja francesa. De ahí viene la expresión "all righty, Macho", que nos tuvo comida la cabeza todo el fin de semana. El Dragon Ball genial, pero yo ya no estoy hecho para esos gráficos tan 3D, con pantallas partidas (eso se lo dejo a Brian de Palma) y cambios de perspectiva y magias salvajes.
Como la página de la Agencia Estatal de Meteorología nunca dice la verdad, ese viernes, en vez de estar nublado, hizo un sol de justicia. María y Duncan se quemaron en la playa. Comimos en la terraza bajo unos rayos salvajes. Miguel nos había preparado ensalada, gazpacho y spaghetti con ajos y anchoas, receta originaria de Santi a la que Miguel añadió su toque maestro: dos cebollas. Perreamos un poco, nos echamos la típica siesta que no te lleva a ningún sitio y emprendimos el viaje al Forum.
Llegamos para ver a The Sonics, mítica banda de garage. Garage en los 60, porque ahora son unos fósiles que tocan música limpia, como la música que escucha el tío (tío de hermano de padre o madre) enrollado que la familia piensa que es un rebelde. Aun así aguantamos como unos jabatos sentaditos en el césped. Después aprovechamos para comprar tickets, etc. y como no había nada que nos interesase, arrastré a algunos a Sebadoh. Yo no era muy fan en los 90, pero me acordaba de OCEAN, una píldora pop maravillosa. Cual fue mi sorpresa cuando a los 20 minutos solo pudimos oír una suerte de popcore con muchísimos punteos rollo "virtuoso" que nos atronaron los oídos y nos hicieron huir despavoridos. Nos acercamos a ver a Why?, un grupo que nadie conocía y que nos dejó bastante fríos, la verdad. Lo más curioso era su cantante, que tocaba la batería con un brazo escayolado y de pie, al más puro estilo El Guincho (aunque nada que ver). Todo esto era una excusa para esperar a Devo, uno de los conciertos que más me apetecían. Los había visto en el FIB del año pasado, pero solo la mitad. Bueno, junto con Portishead, los que más me han gustado. Este grupo no ha sacado disco en muchos muchos años, siguen haciendo lo mismo de siempre, pero da gusto oírles y verles. Espectáculo total, vestidos con monos amarillos, tocando todos los jits, haciendo stripteases grotescos y disfrazándose en el escenario con el único fin de divertir. Qué gloria ver a gente tan mayor con un espíritu tan adolescente. Descansamos un poco tras el concierto, porque sabíamos la que se nos venía encima: The Go! Team. A estos también los había visto en el FIB del año pasado y me encantaron, aunque luego los escucho en casa y me parecen un poco rollo. Bailamos otra vez como locos, y a pesar de ser un concierto divertido, no los he incluido en mi TOP 5 porque solo quería coger a 5 y había grupos que me gustaron más. Corriendo bajamos las macro escaleras del escenario VICE para ver a la sensación de este año: El Guincho. Muy machacón, muy bakala y muy tropical. La verdad es que no lo vi entero y tampoco guardo un recuerdo demasiado especial. Intentaré verle en el día de la música. Luego bailamos un poco y me fui a casa, que estaba hecho un guiñapo.
Al día siguiente (sábado) sí que me levanté tocado (y casi hundido). Deambulé por la mini casa, me duché, empezó a llover y comimos verduras salteadas y pechugas de pollo. Viendo como Miguel se echaba un Katamari me quedé ROQUE y me desperté desorientado a los 20 minutos, con el tiempo justo de vestirme, hacer unos sandwiches y salir pitando para intentar ver a Mary Weiss. ¿Crees que lo conseguimos? No. En la entrada nos encontramos con Henar y con Rafa Taqui, que no paraba de ofrecerme gin-tonic. Henar llevaba en el recinto un ratejo, había ido a ver al myspace a Lightspeed Champion. Yo no había sido capaz, quería pero NO. Resulta que Henar y Nabo hablaron con el cantante y se hicieron una foto con él. De su miniconversa sacaron: que el tipo no sabía cuándo actuaba y que olía "fuerte". Y yo creía que era un enano, pero no, es más o menos como Nabo. Bueno, que me pierdo: lo primero que vi fue precisamente Lightspeed Champion y me encantó. Era una de mis apuestas del festival, y a pesar de que no tocó mi favorita del disco (I could have done this myself), el concierto fue estupendo. La banda era muy weirdo: el cantante, que no hay más que verle en la portada del disco, un violinista que fue el que les hizo la foto a Henar y Nabo (y que ellos pensaban que era uno que pasaba por ahí), un bajista gordo y altísimo vestido de negro y una chica guapísima aporreando la batería como si se le fuera la vida en ello y haciendo unos coros celestiales. Tocaron algunas nuevas que sonaban muy bien, a ver si no sufre el "síndorme del segundo disco". Hubo una cosa que nos enturbió el recital: como había llovido, se formó un charco bastante grande y nadie, obviamente, estaba viendo el concierto metido en el charco. ¿Nadie? No, dos guiris pasadísimos resistían el embiste de la higiene y el civismo y estaban tan flipados que no paraban de bailar encime del charco y mojar a los demás. En la foto del concierto se puede ver a uno de ellos, es el que lleva la gorra de cuadros negros y rosas.
Después de agotarnos subiendo las interminables (y sempiternas) escaleras fuimos a ver a los Solynieve al Salón de myspace, conciertillo bastante aburrido y poco reseñable. Llegamos al escenario ESTRELLA DAMM para ver a Rufus Wainright. Lo digo desde ya: a mí me da igual que toque muy bien, que cante muy bien y que sea un genio. Me aburre soberanamente, y para mi desgracia lo había visto dos veces ya, una con banda y otra en solitario. Esta vez volvió a ser en solitario, que es doble sufrimiento. Qué rollo con los gay marriages, con las spanish guitars, con los hot spanish men & women, con su boyfriend y con todo. Nos tiramos en el césped y ni siquiera ahí estábamos cómodos, qué pestiño, por dios. Incluso una espontánea se levantó y empezó a hacer danza contemporánea al grito de: "A ver si con esto se nos hace más llevadero". Todo el césped la aplaudió y se comentó que sí, que por lo menos durante unos minutos el concierto fue más llevadero. Yo me estaba poniendo de mal humor, entre lo roto que estaba y el Canadian Drama Queen tenía la cabeza que me explotaba. Y lo que venía no iba a ayudarme demasiado. Morente y Lagartija Nick son otros que tal bailan. Que sí, que muy buenos, que mucha fusión, que canciones de Cohen. Pero es que a mí no me gusta el flamenco, no me gusta Lagartija Nick y Leonard Cohen es un desconocido para mí. Sí, lo reconozco: no soy fan de Leonard Cohen. Aguanté el tipo durante todo el concierto, porque la verdad es que era curioso ver a un cantaor y a su coro flamenco en el escenario de un festivla con público mayoritariamente moderno, vanguardia y bastante arrogante. Casi todas las canciones empezaban en plan flamenco puro y a la mitad había una explosión de distorsiones y baterías. Erik Planetas es un batería como la copa de un pino, pero hubiera preferido ver el concierto de un grupo amateur que me gustara. Cuando acabó tomé una decisión: o marcha pal body, o marcha pa casa. Pasé por el concierto de Dinosaur Jr justo cuando tocaron Feel the pain, me dio un poco de subidón (aunque la tocaron rozando el heavy metal) y bajamos por enésima y última vez la escalinata del Averno para ver a un tal Alan Braxe. Ahí sí que sudamos la camiseta y de propina vimos uno de los momentos más chungos del festival. A la 1:00 tenía que empezar DJ Funk y a la 1:10 Alan Braxe seguía con sus beats y sus movidas, a´siq eu DJ Funk, ni corto ni perezoso, agarró un micro, salió al escenario, le grito "You're 10 minutes over time" y se lanzó a darel unas hostias. Unos del backstage salieron, agarraron a los contendientes, hubo unas voces más altas que otras y Alan Braxe se piró. Pero eso sí, durante la reyerta arrabalera nunca dejó de sonar música. Parecíaq ue estaba medio orquestado. A mí plin, que me fui antes de que empezara DJ Funk con la sensación de habérmelo pasaod muy bien. Si era ficción, era una ficción de lo más entretenida.
En el ATP actuaban Les Savy Fav, un grupo del que había leído cosas en el NME pero que no había esuchado. La verdad es que la música no era nada del otro jueves, pero el cantante (en la foto de arriba) era un auténtico "animal escénico" y ataviado con una malla de cuerpo entero y de estampado fantasía se tiró al público y animó bastante. Qué lástima no haber estado cerca para tirarle unas lindas pics. Una pena de verdad fue que la gente con la que estaba se amuermó en el césped y nos fuimos. De ese momento me acuerdo de una cosa: que Sergi me presentó a una amiga suya diciendo que era muy salao. Me hizo gracia. Sergi sí que es salao. El último concierto que vi del festival fue además la gran revelación: Animal Collective. No los había escuchado y flipé. Disfruté muchísimo y me dio la sensación de que El Guincho quiere llegar a ser como ellos, y que cuando lo consiga se le habrá pasado el arroz. Buen sabor de boca para acabar un festival en el que me lo he pasado de perlas, me he quedado afónico, he estado con muchísima gente conocida y me he reafirmado en mi convicción de que el futuro son los festivales en ciudad. Fuera campings, pafuera telarañas. Queremos estar en una ciudad, poder ducharnos, ir a un McDonald's y dormir sobre un colchón. Lo ves todo de otra manera.
Qué crónica más larga, por dios.
Top 5 primavera sound
1. PORTISHEAD
2. DEVO
3. VAMPIRE WEEKEND
4. ANIMAL COLLECTIVE
5. LIGHTSPEED CHAMPION
PADRES ELFOS
Hace 16 minutos
8 comentarios:
Bueno, tengamos un poco de dimensión histórica: The Sonics hacían la música del tío rebelde cuando el tío rebelde aún no había nacido.
Lo que dice la de arriba es verdad, por eso el tío rebelde escucha a The Sonics porque de rebeldes ya no tienen NÁ.
Por cierto, la reyerta fue entre DJ Assault y Alan Braxe, no DJ Funk, a este no le vimos el PELO!
ya sabes que no soy muy ducho en DJS internacionales... perdón por el error!
Y lo de The SOnics... que sí, que era música muy rebelde, pero me refería precisamente a que se han suavizado y ya no son lo que fueron...
Estoy de acuerdo con lo de Los Sonics...A mi me aburrieron muchisimo, que es cierto que hace 45 fueron los inventores del garaje y mil historias, pero ahora se han convertido en una banda de Rock Americano de lo mas standar.
respecto a morente/lagartija nick y a leonard...a los primeros (juntos) los descubri hace un año, y me fliparon. Es raruno, raruno, pero mola un montón. YLeonard Cohen empece a escucharlo en serio hace menos de un año...y es increíble!!te grabare unos cuantos discos de los viejos, que luego en los 80-90 para mi opinión fue a peor, pero el principio sobre todo es buenisimo...
lo flipo con la dimensión histórica. me la pela lo que hicieran en su momento, a mi, me aburrieron. era como escuchar kiss fm, especial rock americano. todo grandes éxitos y hitazos, pero que me dieron casi o tan igual como rufus y sus lamentos gayers.
ver a los sonics tiene el mismo valor que hacer noche en la calle para comprar la entrada de los rollings.
y de hecho, yo fui al primavera con tres premisas básicas: no ver a portishead ni a sonics ni a rufus. y si a ver a grupos que me gustaban.
a mi, omega me flipó. más que nada por que era un NQV en mayusculas y en comic sans.
y la distorsión me va.
mucho me temo que en ese concierto Lagartija Nick con Morente hubiera estado en el mismo mood que en el de Morrissey de hace un par de años. Flipo con lo de Alan Braxe y las hostias. Por cierto, creo que un cd de Alan Braxe que se llama upper cuts fue el primer disco de dj que me compré. Ya casi me había olvidado de él.
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